“Hoy los pacientes saben que en algún momento van a llegar los clowns”
¿Por qué el hospital Malvinas Argentinas decidió incorporar un servicio de payasos?
Hace muchos años atrás, cuando el Hospital pediátrico funcionaba en otro edificio mucho más chico, alejado y sin los recursos con los que contamos actualmente, decidí convertir esa falta de recursos en una posibilidad para aquel pibe que necesitaba ir al hospital o internarse y permanecer varios días. Realizamos un espectáculo de todo un día, cortando la calle del frente del hospital y plantando un escenario inmenso con artistas de máximo nivel. Nuestras familias se comprometieron, cosieron trajes, plancharon ropas, armaron escenografía. Ese proyecto se llamó ” Medicina para el Alma”, no me voy a olvidar nunca. Generó una transformación maravillosa en esa gente que venía al hospital con quejas y reclamos. Fue increíble. Luego vino la etapa de construcción del hospital nuevo. Este, en el que trabajamos ahora. Y así fue como un día la Secretaria de Salud de Malvinas Argentinas me envió al Miami Children Hospital, para ver sus instalaciones, su tecnología y el manejo de su recurso humano y poder implementar parte de esa estrategia en nuestro nuevo Hospital. Pero poco de eso hice. Allí apareció en el pasillo un grupo de clowns que me maravillaron. Eran los artistas del Big Apple Circus. Me cautivaron. Literalmente me cautivaron. Y me instalé en sus oficinas, en sus recorridas, en su radio y en su mundo mágico. Y así fue que cuando volví, lejos de contar respecto de la tecnología y la buena medicina que hacen (que por supuesto ya hemos alcanzado en Malvinas) relate lo que viví con The Care Unit. Inmediatamente me puse en contacto con el Dr. Andrés Kogan de Alegría Intensiva, al que no me hizo falta contarle ni decirle nada. Simplemente se puso a trabajar para poder desembarcar con los artistas aquí. Y así fue.
Desde el punto de vista médico, ¿cuál es el impacto más visible del rol de los payasos en el Hospital Malvinas Argentinas?
Existen algunas situaciones que pueden graficar esto. Cuando te das una vuelta con los clowns por el hospital podes ver como aquel chico que sufre una neumonía y tiene que nebulizarse, situación que le incomoda muchísimo y ¡genera rabietas incontrolables! Mágicamente gira su cabeza y lentamente muta su rabieta a una leve sonrisa tímida. Y luego a una paz inmensa. Esto hace que aquella nebulización o aporte de oxigeno pueda ser mucho más efectivo y con una concentración mayor hacia los pulmones. Lo mismo sucede con los procedimientos invasivos. Y lo mismo con toda situación que genere estrés. Estos beneficios redundan en acortar tiempos.
¿Qué beneficios resaltaría sobre los pacientes? ¿Y sobre sus familiares?
Hoy los pacientes saben que en algún momento van a llegar los clowns. Esperan ese momento. El tiempo les corre distinto. La llegada a su casa está más cerca. Y un pinchazo pasa a ser solo eso: un pinchazo. Los familiares se sorprenden. Y quedan embelesados. Ya pasamos a tener más de un paciente por cama. El niño internado y su familiar que se trasforma en niño durante esos minutos. No hay nada que los distraiga de eso. Por otro lado, ha reducido sustancialmente el nivel de queja de los familiares por situaciones que siendo mínimas, en otra circunstancia hubiera desatado violencia.
¿Cómo describiría el ánimo de un niño internado el día que es visitado por payasos versus el resto de los días?
Al principio del programa era evidente que los días que teníamos a nuestros chicos (así los llamo yo… ¡los clowns son ya mis chicos!), los pacientes se convertían en niños. Simplemente en niños que permanecían en el hospital por algún motivo. El resto de los días volvía a ser el hospital de siempre. Pero hoy ya no es así, y hemos logrado que durante la semana se espere a los clowns con ansiedad. En nuestro hospital hemos decidido que la gráfica y la infografía lleven imágenes de nuestros clowns. Entonces no es raro ver en los pasillos a chicos que ya reconocen a nuestros artistas y señalen a cada uno de ellos con el nombre. Son parte de nuestro equipo. Es así que anímicamente los pacientes que concurren al hospital día a día (más de 1000 por día) entren y salgan con un humor diferente. ¡Lo logramos!
¿Recibe comentarios sobre la actividad de los payasos por parte del personal del hospital (médicos, enfermeros, administrativos)? ¿Qué suelen resaltar?
Los días jueves son especiales. El clima del hospital cambia drásticamente. La desfachatez de los clowns no tiene límites. Un día comenzaron a interactuar con una persona que ellas no conocían. Jugaron, se divirtieron. Aquella persona no podía creer lo que estaba viviendo. Le pareció magia y luz. Era el Secretario de Salud de Malvinas Argentinas. Así es como no hay persona que no espere a los clowns los jueves.
¿Hacia dónde piensa que debe evolucionar, en términos enfoques de salud pública, la relación entre la atención pediátrica y los payasos de hospital?
Estamos seguros y así lo adoptamos que el programa de payasos de hospital ya se convirtió en Malvinas Argentinas, en una política de salud pública. Ya no hay dudas de que son parte de nuestro equipo de salud. Y en esa dirección vamos. Creemos que este programa debe desarrollarse de esta manera. Cada niño internado o enfermo tiene derecho a divertirse. Y estamos dispuestos a defender este derecho cueste lo que cueste. Alegría intensiva forma hoy parte del equipo de salud de Malvinas Argentinas. Y estamos orgullosos de tenerlos. Gracias.