Estaba detrás del ventanal. Era ella, una estrella de rock con gorro y lentes de sol.
Apenas la vieron, el Dr. Pesto y la Dra. Lagarza se desesperaban por entrar a pedirle un autógrafo a su ídola del rock.
Adentro estaba su seguridad privada, el Dr. Sencillo, quien le preguntó si podía recibir visitas de sus fans. Ella le contestó que sí, que los hiciera pasar porque estaba en su momento de relax.
Los fans entraron subidos uno arriba del otro. Estaban emocionadísimos, entusiasmadísimos, porque por fin iban a poder conocerla en persona.
La Dra. Lagarza le pidió que el autógrafo dijera: “Para la Dra. Lagarza, con todo el amor del mundo, porque sé que sos mi fan número uno y me seguís a todas partes. Con Cariño inmenso.”
Pero a ella le pareció que era demasiado largo, así que con su bolígrafo escribió en su mano lo siguiente:
“Con cariño, de Gise para Lagarza”
Por último, y antes de irse, le preguntaron si iba a dar su show que tenía previsto para esa noche, pero ella les dijo que no, que lo iba a suspender porque tenía cosas más importantes que hacer.
A la espera de su próximo concierto, los Dres. se despidieron. Al irse, escucharon que ella les dijo:
– No me cambien por otra.
Dra. Lagarza (Aldana González)
Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata